El sistema contará con trece nuevos autobuses eléctricos de alta capacidad (de 12 y 18 metros) que serán «vanguardistas e innovadores tanto por dentro como por fuera». El BEI completará un recorrido de 10 kilómetros y 24 paradas en cada uno de los sentidos.
El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, ha aprobado sacar a licitación el proyecto de implantación del BUS Eléctrico Inteligente (BEI) en la capital alavesa. El desarrollo de este moderno e innovador sistema de transporte eléctrico contará con un presupuesto de 44.691.341,71 euros y se financiará con aportación del Consistorio, del Gobierno Vasco y de la Diputación Foral de Álava.
Para el alcalde, Gorka Urtaran esta apuesta es importante para que Vitoria-Gasteiz siga trabajando para la transición a la movilidad eléctrica y de 0 emisiones a través de un sistema de transporte público eficiente y de alta capacidad que conectará mejora todos los barrios de la ciudad y fomentará la movilidad sostenible y saludable.
El plazo de implantación de todo el proyecto será de 65 semanas a partir de la adjudicación del contrato, que incluye la redacción de los proyectos; la construcción de la infraestructura necesaria; las intervenciones en el espacio público para la urbanización de los carriles exclusivos del BEI; la colocación de las paradas y su equipamiento; o la fabricación y puesta en marcha de los vehículos, así como su mantenimiento.
Cómo será el BEI
El bus eléctrico dará servicio en la actual línea 2 de la red de autobuses urbanos y será explotado por la empresa municipal TUVISA. El BEI contará con un trazado de algo más de 10 kilómetros y 24 nuevas paradas por sentido. Los vehículos, tendrán una frecuencia de 8 minutos, circularán por carriles exclusivos en gran parte del recorrido y disfrutarán de prioridad semafórica en los cruces.
En total serán 7 autobuses de 18 metros de longititud y 6 de 12 metros de longitud 100×100 eléctricos con tecnología innovadora en ámbitos como la experiencia de usuario, la información, los sistemas de seguridad y la ayuda a la conducción.
Esos nuevos equipos contarán con capacidad mínima para 65 personas(21 de ellas sentadas) en el caso de los pequeños, mientras que los articulados darán servicio a un mínimo de 100 personas(30 sentadas). También incorporarán tres espacios para sillas de ruedas y, los articulados, un hueco extra para carritos. De cara a facilitar la accesibilidad, los autobuses articulados tendrán cuatro puertas, situándose dos accesos entre la parte delantera y la unión articulada y las otras dos en la parte trasera. Estas puertas de acceso serán deslizantes y dispondrán de botón de apertura exterior e interior, similar al tranvía.
Los autobuses también dispondrán de tres pantallas led para que los usuarios puedan obtener información relativa a la ruta, las correspondencias, los tiempos de espera, la siguiente parada y demás. También existirán cargadores USB así como, en el caso de los articulados, una jaula para maletas. En cuanto a la consola del personal conductor, proporcionará información a tiempo real sobre la ruta, los apartados técnicos del autobús o posibles incidencias, también incorporarán mampara antivandálica. Tendrán un sistema de guiado automático y de asistencia al conductor de aproximación a parada, minimizando la distancia entre bordillo y vehículo. Los espejos retrovisores, además, serán cámaras y no espejos.
En cuanto a las paradas, las marquesinas serán parecidas a la del tranvía, con estética moderna, información multimedia actualizada a tiempo real, canceladoras y expendedoras de billetes. Habrá tres tipos: pequeñas, estándares y grandes, que contarán con andenes enfrentados, serán más accesibles y tendrán accesos por ambos extremos.
Los vehículos se cargarán a través de un sistema de carga de rápida de cuatro minutos mediante tecnología pantógrafo, con dos puntos de carga por línea.