Schréder realza el patrimonio histórico y convierte a Talavera de la Reina en una ciudad más eficiente, sostenible e inteligente con el suministro de más de 8.000 puntos de luz
Talavera de la Reina con 83.663 habitantes es el segundo municipio mas poblado de Toledo y es conocido mundialmente por su arraigada tradición en la elaboración de la cerámica y por su patrimonio arquitectónico, siendo un claro referente turístico de Castilla-La Mancha.
En su propósito de realzar el patrimonio y convertirse en una ciudad más eficiente, sostenible e inteligente, el municipio ha llevado a cabo un plan de modernización del alumbrado, a través de dos líneas de financiación, fondos IDAE y fondos ITI (Inversión Territorial Integrada) con financiación del Gobierno regional FEDER (fondos europeos).
Renovación del alumbrado
Para la renovación del alumbrado se tuvieron en cuenta tres objetivos: conseguir un alumbrado eficiente con la sustitución a tecnología LED; un mayor ahorro con la implantación de sistemas de conectividad, control y sensorización y el embellecimiento del patrimonio artístico y arquitectónico con la instalación de luminarias que por su diseño y estética guardaran armonía con el paisaje.
Para conseguirlo, se cambiaron a tecnología LED más de 8.000 puntos de luz con sistemas de telegestión punto a punto integrado Schréder Nightshift y etiqueta Smart Label, y se apostó por las soluciones urban de la firma NEOS con columna Pron, YMERA, THYLYA, KAZÚ, VALENTINO, ALBANI, STYLAGE, KIO y Retrofit Fernandino y Villa que por su estética versátil y refinada se integran perfectamente en el paisaje urbano.
Ahorro energía y calidad de luz
Además, se han logrado ahorros superiores al 75% lo que se traduce a 4.820.846 kW/año, lo que supone una reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera de 1.856 Tn, gracias al sistema de iluminación Schréder Nightshift, un sistema que permite gestionar, medir y supervisar la red de alumbrado de forma remota, así como controlar el consumo de energía y detectar posibles fallos.
Con todo esto, se ha conseguido una mejora de la calidad de la luz a través del aumento en el índice de reproducción cromática superior a 70 haciendo uso de distintas temperaturas de color 3000ºK y 4000º K diferenciando así zonas de la localidad.
También se ha tenido presente el criterio de uniformidad, con el diseño de fotometría que en combinación con distintas ópticas adaptadas a cada tipo de instalación se ha conseguido una mejora en los niveles de iluminación y una reducción de la contaminación lumínica.