El Centro de Arte Contemporáneo de Málaga ha presentado las obras realizadas en la última década por el escultor británico Richard Deacon. En la exposición, comisariada por Fernando Francés, se pudieron ver piezas inéditas de su trabajo más reciente a través de una treintena de esculturas que inundaron el espacio principal del centro. El empleo de diversos materiales, que alcanzan formas inimaginables, y su particular visión del espacio y la interacción entre las obras y la sala, hacen que la obra de este escultor sea única. Richard Deacon es uno de los artistas más importantes e influyentes de la escena contemporánea. En 1987 recibió el prestigioso Premio Turner de escultura.
«Cambiar los materiales de una obra a otra es una forma de comenzar de nuevo cada vez (y de este modo terminar lo que se ha hecho antes)» cita textualmente Richard Deacon (Bangor, Gales, 1949) sobre su trabajo. El escultor británico justifica de esta manera el empleo de madera, resina de poliéster, cerámica, grapas, acero o cristal en su trabajo. Cualquier elemento u objeto que se pueda encontrar en una ferretería lo emplea en sus piezas con resultados impensables. Lo que se espera de los materiales con los que trabaja no tiene nada que ver con el resultado final en su obra. La creatividad no encuentra barrera alguna en la apariencia rígida o frágil de un material. El artista moldea piezas hasta conseguir esculturas únicas e impactantes a los ojos del espectador.
Para Fernando Francés, director del CAC Málaga: «Sus esculturas salpicadas por el espacio principal del centro envuelven al visitante en una atmósfera especial, la atmósfera que ayudará a analizar con detenimiento lo que se tiene enfrente, la historia de un material desde el origen mismo. Richard Deacon lleva a cabo un estudio minucioso de lo que tiene ante sí, si es un trozo de metal, vidrio, madera, poliéster, PVC o cerámica y construye un discurso en torno. Se tiene en cuenta todo el proceso: inicio, nudo y desenlace. Todo cobra sentido al final. La frase que da título a la pieza también es analizada y concebida para representar algo más que meras palabras vacías. Una vez contemplada su obra, el artista llena de contenido todo el espacio de una forma coherente y con sentido». […]