Mario Corea, Lluis Morán. Arquitectos
Como numerosos municipios catalanes, Sabadell fue una de las subsedes de los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992. Sabadell es una ciudad con importantes clubes deportivos que cuenta, además, con una larga y prestigiosa tradición en atletismo. La decisión de construir un estadio cubierto de atletismo, el primero de este tipo en Cataluña, se adoptó tanto para promover el deporte como para proporcionar a Sabadell la oportunidad de acoger competiciones regionales, nacionales e internacionales.
Emplazado en un complejo polideportivo en el barrio de Sant Oleguer, el estadio, con aforo para 2.500 espectadores, es la principal pieza del conjunto; como tal, constituye un importante punto de referencia para la ciudad y posee, igualmente, una significación simbólica para sus habitantes.
El estadio está ubicado en una larga y estrecha franja que presentaba un gran desnivel en sección y una asimetría intensamente marcada. Dichos parámetros permitieron definir el carácter de la solución arquitectónica, ya que la estructura adquiriría su identidad mediante la topografía del lugar. Asimismo, el edificio se adaptaría al lugar minimizando al mismo tiempo su impacto sobre el paisaje.