El sistema advierte a los conductores cuando cruzan los peatones con placas lumínicas que se activan con poca luz o de noche, y a los ciclistas con bandas de luz rojas situadas en el carril bici.
Instalado en la Ronda do Carmen, el sistema mejora la seguridad de los peatones y de los ciclistas, ya que por esta vía se está ejecutando el carril bici, así como de los peregrinos, porque une los tramos del Camino Primitivo que atraviesa esta avenida y que cortaba la mediana.
El sistema elegido advierte a los conductores del paso de peatones con placas de luz blanca LED implantadas en el asfalto, que se encienden sólo cuando cruzan las personas.
Se activa de noche o cuando hay poca luz diurna, para evitar la contaminación lumínica permanente. Además, avisa a los ciclistas del paso de cebra, en este caso día y noche de manera constante, con bandas de luz rojas implantadas en el mismo carril bici. También se accionan las señales verticales luminosas, que complementan a las señales que están al ras de suelo.