La escultura Alas de México, del escultor mexicano Jorge Marín, se instala en el Parque Norte para formar parte del escenario urbano madrileño.
La escultura en bronce Alas de México, de Jorge Marín, ha llegado a Madrid para colocarse de manera permanente en el Parque Norte. La instalación resalta la unión de las dos ciudades capitales de ambos países que comparten un vínculo histórico, lingüístico, social, económico y cultural.
Después de instalarse en Tel Aviv, Los Ángeles, San Antonio, Nagoya, Berlín, Singapur, Quebec, Costa Rica y, por supuesto, Ciudad de México, la décima escultura donada llega a España gracias al patrocinio de Avanza by Mobility ADO, y el apoyo de Jorge Marín, el Ayuntamiento de Madrid, el Gobierno de la Ciudad de México y la Embajada de México en España.
Con la llegada de esta escultura a Madrid se reafirman los lazos de amistad y hermanamiento que han mantenido unidos a México y España. Aludiendo a las “Alas” como símbolo de universalidad y libertad, se resalta también la importancia de la migración y el intercambio cultural que enriquece a las sociedades: las Alas de México en Madrid representan la diversidad que penetra en la sociedad madrileña, su cultura y su economía.
“Las Alas de México son unas alas migrantes. Desde 2010, varios pares de estas alas han iniciado un viaje que continúa. Algunas donadas de manera permanente, otras itinerantes”. En conjunto han recorrido miles de kilómetros para establecer un diálogo entre culturas. Particularmente, estas alas que llegan a Madrid son únicas. Traen consigo, simbólicamente, algo de las ciudades e imaginarios de los que se han nutrido.
“Como creador de ellas, reconozco que no están completas: esta escultura se concluye cuando la gente la porta, se fotografía e interactúa con ella. Al igual que las ciudades, que cambian y se reconfiguran con el intercambio cultural, estas alas se transforman en cada lugar al que llegan. Más allá del bronce, traen historias, pensamientos y sueños”, señaló el artista.