Arturo Rubio Dobón. Responsable de desarrollo de negocio, División de sistemas inteligentes. ELT, Especialidades Luminotécnicas SAU.
Introducción
La interoperabilidad de los servicios municipales es clave cuando se abordan proyectos dirigidos a la realización de una gestión urbana más eficiente, sostenible y centrada en el ciudadano, comúnmente incluidos en el marco de lo que conocemos como Smart City. Sin embargo, no siempre es fácil integrar armónicamente los distintos servicios municipales debido a su estructura heterogénea y a la ausencia de estándares tecnológicos para ello.
Afortunadamente los últimos avances tecnológicos surgidos en el ecosistema del Internet de las cosas (IoT) hacen posible abordar dicho problema de una manera más optimista. En este sentido contamos con un potencial aliado inesperado, la red de alumbrado público.
La integración tecnológica e interoperabilidad con otros sistemas, claves del alumbrado inteligente

La red de alumbrado público está presente en los lugares más remotos y cubre todos los lugares habitados del territorio, proporcionando desde su privilegiada posición cerca de los ciudadanos y conectada a la red eléctrica no solo el imprescindible servicio de alumbrado, sino también una plataforma ideal para servir de soporte a otros muchos servicios.
Para que esto sea possible, el equipo de control de la luminaria (Driver o convertidor LED) ha de incorporar capacidad de adquisición, almacenamiento y tratamiento de datos mediante arquitecturas digitales basadas en microprocesador, y disponer de la capacidad de almacenamiento e intercambio bidireccional de esta información.
Dicha información debe poder mostrarse al usuario de una manera sencilla e intuitiva mediante una aplicación de usuario, de gestión web, multidispositivo y con diferentes perfiles de usuario, basado en la representación geolocalizada de las luminarias. Todo ello garantizando en todo momento la seguridad, privacidad y fiabilidad del conjunto del sistema para asegurar el servicio de una infraestructura crítica como lo es la instalación alumbrado.
Una instalación de esas características hace posible que cada luminaria para alumbrado exterior se convierta, de facto, en un servidor de datos (data-enabled lighting). La infraestructura de alumbrado pasa de este modo a convertirse en un servicio: además de ser puntos de luz, las luminarias son nodos de la infraestructura de Internet de las Cosas (IoT).