El pasado miércoles se celebró el cuarto laboratorio preparatorio de la cuarta edición del Foro de las Ciudades de Madrid, que se enmarcar en el Foro Medio Ambiente y Sostenibilidad, organizado por IFEMA.
En esta ocasión un grupo de expertos de España, México y Perú analizaron si las ciudades están preparadas para responder a las demandas de la infancia, ofreciendo espacios públicos de calidad, seguridad y lugares para el aprendizaje y la igualdad.
Generalmente celebrados a puerta cerrada, este laboratorio se celebró de manera virtual y en abierto al público. El nuevo escenario que dibuja la era post-covid ofrece una oportunidad para reconfigurar las ciudades y devolver el espacio público —hasta ahora en gran medida acaparado por el automóvil— a los ciudadanos. Lo que argumentan los expertos es: si la pandemia va a transformar por completo el modo en que vivimos, la pregunta que los urbanistas deben plantearse es cómo hacer que estos cambios sean a mejor, cómo repensar las urbes para que sean ahora más sostenibles, resilientes, seguras e inclusivas.
Bajo el título “Ciudad Diversa. Espacio público para el juego y el aprendizaje”. La conversación se desarrolló en torno a la infancia y su derecho a participar de la ciudad y sus dinámicas, recuperando su autonomía, tiempo y espacio para el juego libre.
Participaron en la sesión: Javier González Patiño, profesor de la Facultad de Educación de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y miembro de la Cátedra Unesco de Educación para la Justicia Social; Lucía Losoviz, responsable de Políticas Locales de Infancia y Participación en el Comité Español de UNICEF y de la red Ciudades Amigas de la Infancia; Marta Román, geógrafa, miembro de la consultora gea21, docente, articulista y conferenciante en temas de perspectivas de género y de generación en el urbanismo; Karina Gutiérrez, responsable de Dinamización Vecinal del área de Compromiso Social de Distrito Castellana Norte (DCN); Miren Jiménez, presidenta de la Asociación Española de Fabricantes de Mobiliario Urbano y Parques Infantiles, AFAMOUR; Juan Carlos Rojo Carrascal, profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Sinaloa (México), asesor de CIDEU (Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano), presidente de Integra Comunidad SC y promotor de la Ciudad de los Niños en Cuiacán; Vanesa Lainez, de Urban95 en Lima y coordinadora de Programas en Perú de la Fundación Bernard van Leer, y Lola González, directora de FSMS.
Conclusiones
La necesidad de hacer que los niños, niñas y adolescentes vuelvan a sentir el espacio urbano como suyo fue una de las conclusiones a las que se llegó en este debate. Esto pasa por recuperar la seguridad en las calles, lo que exige restar espacio al coche privado y dárselo a las personas, de manera que se fomente, además de la vida en la calle, el comercio local y adhesión en los barrios.
A lo largo de la charla se puso en valor el juego, y no sólo como derecho fundamental para el desarrollo de las capacidades de la infancia, sino también como una herramienta clave para favorecer la igualdad y la inclusión en la sociedad, además de proporcionar estabilidad.
Políticas a seguir
Respecto a las políticas públicas que se deben tomar para empoderar a los niños y niñas para que vuelvan a “tomar las calles”, los ponentes incidieron en la visión global, holística, que debe contemplar la planificación urbana, en tanto que la ciudad es “un continuo” y no se debe concebir de manera compartimentada en islas o espacios específicos para el ocio. Así lo expuso Juan Carlos Rojo de la Universidad Autónoma de Sinaloa: “debemos concebir el espacio público como uno solo, con una continuidad. Si decimos espacio público a la plaza o al parque, todo lo demás no lo concebimos como espacio público. Los coches segregan la ciudad, y el espacio que ocupan se convierte en privado”.
Para Miren Jiménez, (AFAMOUR) existe una situación económica que va a perjudicar a mucha gente, y ahora es el momento de repensar muchas cosas. «Nada va a ser como antes, puede ser mejor o peor. Hagamos que sea mejor, lo que pasará por una mayor exigencia de transparencia y pro abandonar el yo para ir al nosotros».