No hace tanto tiempo, hablar de accesibilidad en las áreas de juegos infantiles era un tema novedoso. Por suerte, ahora ya no es ni siquiera un tema colateral, sino una premisa prácticamente asumida, por lo menos en muchos de los proyectos. La evolución ha sido lógica y se van abriendo opciones y multiplicando los recursos. Cada día hay más preocupación colectiva, y ya no son sólo algunos fabricantes que se van especializando, sino también organismos y fundaciones como la Design For All Fundation, Säjai Foundation, Shane’s Inspiration y muchas otras, que aúnan sus esfuerzos para conseguir que cada día haya más implicación por parte de todos en que los elementos con los que interactuamos día a día nos unan y no nos discriminen. Estamos entonces de acuerdo en un compromiso común hacia la accesibilidad.
Tipologías de áreas accesibles
Una vez ya consideramos desarrollado suficientemente el concepto de la necesidad ineludible de plantear la accesibilidad en las áreas de juegos infantiles, podemos distinguir actualmente diferentes tipologías respecto a los grados de adecuación a la integración de todos los niños en el diseño de áreas de juegos.
Vamos a clasificarlos aquí por niveles, de menor a mayor integración a los niños con discapacidades:
- Nivel 0, estaría formado por aquellas áreas no adaptadas y que no han tenido en cuenta las discapacidades de los niños que pueden jugar en ellas, ya sea por los elementos, por el pavimento o por los accesos a las mismas.
- Nivel 1, el más común en nuestra geografía, son las compuestas por estructuras de juego apoyadas con elementos independientes. Ya no es tan extraño encontrar alguno de estos elementos independientes que estén enfocados a niños con discapacidades físicas (casi nunca psíquicas), pero que son muchas veces demasiado evidentes, no integradores. Como las estructuras no están adaptadas el resultado final puede ser incluso excluyente, separando a un tipo de niños de otros.
- Nivel 2, tipología que forman aquellas áreas en las que las estructuras tradicionales cambian las escaleras y/o entradas inaccesibles por rampas y plataformas, que permiten la accesibilidad a niños con sillas de ruedas y convirtiendo el juego en accesible para todos. Estas áreas son mucho más integradoras que las de nivel 1, pero aumentan en muchas ocasiones considerablemente el precio del elemento, también el área de implantación y no contemplan todos los tipos de discapacidades.
- Nivel 3, formado por un tipo de áreas mucho más evolucionadas en este sentido y que están diseñadas y pensadas para jugar a un solo nivel, el del suelo, permitiendo la continuidad del pavimento en todo momento. Son áreas sin barreras, sin elementos aparatosos, con actividades accesibles a todos los niños sin hacer diferencias por capacidades físicas. Desafortunadamente, no existen muchas estructuras de estas características en nuestros parques, pero ya vemos algunos ejemplos magníficos, que permiten interactuar a niños con diferentes capacidades físicas.
Ya sería un objetivo encomiable que las áreas de juego se pensaran en este nivel 3 de accesibilidad, pero proponemos un pequeño esfuerzo adicional e ir al siguiente nivel que va un poco más allá [leer más… en la edición impresa]